Apple ha decidido cancelar su proyecto de automóvil eléctrico, tras una década de desarrollo. Las acciones de la compañía experimentaron un aumento del 0,7% en las operaciones de tarde, aliviando las pérdidas sufridas durante la jornada de negociación. Los empleados que trabajan en el proyecto serán reubicados en la división de inteligencia artificial de la empresa.
Si se confirma la noticia, la firma se enfocará más en la inteligencia artificial, lo que podría dar a los inversores una visión más optimista sobre los esfuerzos y la capacidad de Apple para competir en la carrera tecnológica.
Hasta ahora, Apple se ha mantenido a una distancia prudente respecto a la inteligencia artificial, a diferencia de otras grandes compañías tecnológicas como Alphabet y Microsoft, quienes tienen ventaja en la integración de tecnologías innovadoras.
La empresa se abstuvo de realizar comentarios al respecto.
La alta tasa de interés para controlar la inflación ha empeorado el sentimiento de los consumidores y ha llevado a una desaceleración en la demanda de vehículos eléctricos, los cuales suelen tener un precio más elevado, lo que ha llevado a la industria a reducir empleos y producción.
Múltiples fabricantes importantes de automóviles, incluyendo al líder del mercado de vehículos eléctricos, Tesla, han optado por retirar sus inversiones, modificando algunos planes para enfocarse en híbridos en vez de vehículos eléctricos.
Apple ha dado comienzo al Proyecto Titán, una iniciativa automotriz que ha sido objeto de gran interés en Silicon Valley durante la última década en relación a los vehículos autónomos.
Según un informe de Reuters en 2020, Apple estaba considerando introducir un automóvil en el mercado tan pronto como en 2024 o 2025. Sin embargo, el progreso del proyecto ha sido desigual incluso antes de la interrupción de la pandemia de COVID-19 en la industria automotriz mundial.
En 2019, Apple despidió a 190 empleados del grupo tras una reestructuración de su enfoque enfocado en el software. Además, el diseño del concept car también evolucionó, pasando de ser un vehículo autónomo radical sin volante que se desviaba del diseño automotriz tradicional, a convertirse en un automóvil más convencional con características avanzadas de asistencia al conductor.