Christine Lagarde en su condición de presidenta del Banco Central Europeo, ha intervenido ante la Comisión de Asuntos Económicos y Monetarios del Parlamento Europeo. La presidenta ha reconocido que la eurozona se ha estancado en el último trimestre de 2023. Aun así, si bien los datos recientes todavía apuntan a una actividad económica moderada en el corto plazo, de cara al año que viene, estima la actividad se recupere.
En referencia a la inflación y a las presiones de los precios, Lagarde enfatizó que si bien el sector de servicios está mostrando signos de resiliencia, la inflación subyacente está disminuyendo gradualmente. El crecimiento de los salarios sigue siendo fuerte y espera que se conviertan en el factor que mas influya en un repunte de la inflación. En los próximos trimestres, los salarios serian los causantes de un repunte de los precios.
Lagarde volvió a recordar que el riesgo de las presiones salariales ya estaba previsto por el BCE y el impacto de los salarios en la inflación vendrá determinada por la negociación entre las patronales y los sindicatos. Los últimos datos del año 2023 en referencia a salarios demuestra cierta estabilización.
«En general, los últimos datos confirman que el proceso de deflación continúa y se espera una tendencia gradual a la baja en 2024», afirmó Christine Lagarde. También indicó: : «Se espera que continúe el actual proceso deflacionario, pero el Consejo debe tener confianza en que esto nos llevará de forma sostenible al objetivo del 2%».