El consejero delegado de Tesla, Elon Musk, afirmó con confianza el miércoles que los fabricantes chinos de automóviles superarán a sus competidores mundiales en ausencia de barreras comerciales. Esto pone de relieve la intensa competencia a la que se enfrenta el líder del mercado estadounidense de vehículos eléctricos por parte de empresas como BYD, que están ampliando agresivamente su presencia mundial.
Esta afirmación la hizo durante una llamada con analistas posterior a la presentación de resultados el miércoles, después de que BYD superara a Tesla como la empresa de vehículos eléctricos más vendida del mundo el trimestre pasado, a pesar de los profundos recortes de precios de Tesla hasta 2023.
Según Musk, las empresas automovilísticas chinas son las más competitivas y lograrán un éxito significativo fuera de China, dependiendo del establecimiento de aranceles o barreras comerciales.
«Si no se establecen barreras comerciales, prácticamente demolerán a la mayoría de las demás empresas automovilísticas del mundo», afirmó con confianza. «Son extremadamente buenos».
Cuando se le preguntó por los comentarios de Musk, el Ministerio de Asuntos Exteriores chino respondió en una reunión informativa periódica el jueves que desconocía los informes, pero que abogaba por «mantener un entorno empresarial justo, equitativo y abierto».
Musk tiene motivos para estar preocupado.
El año pasado inició una guerra de precios para atraer a los consumidores afectados por los altos costes de los préstamos, lo que a su vez presionó los márgenes de Tesla y causó inquietud entre los inversores. El miércoles, Musk advirtió de que Tesla se estaba acercando al límite natural de reducción de costes con su actual línea de productos.